MILAGROS, A LOURDES
Pero metámonos en faena, que últimamente tengo una facilidad para la disgresión y la palabrería que cada día me voy pareciendo más a mi querido presidente Zapatero, al que en la intimidad llamo Zetapé. Decía pues que la recurrencia a la virgen respectiva (ha pasado recientemente con el Real Madrid de Baloncesto, pasó con el Barcelona de balonmano y fútbol y así sucesivamente…) es muy frecuente en este país. Pero por mucho que nos eche una mano el cielo divino a través de sus múltiples habitantes (incluido San Balón), hay cosas que son imposibles. Vamos, que ni un milagro de todo el santoral junto. Me he puesto a pensar (cosa que hago de vez en cuando, pues tengo esa fea costumbre) y he encontrado al menos diez eventos, éxitos o carambolas deportivas que los españolitos aficionados al deporte nunca lograremos alcanzar, es decir, que no podremos ofrecer a nuestra virgen respectiva en agradecimiento agradecido. Aquí los detallo, animando a los ocasionales lectores a que prolonguen la lista con otros ejemplillos que mi amplia inteligencia aún no logra abarcar.
NI UN MILAGRO DE LA VIRGEN DE LOURDES permitirá ….
… que la selección española de fútbol gane un mundial.
… que un tenista español llegue a las semifinales de Wimbledon.
… que Fernando Alonso cierre el pico.
… que Ballesteros resucite para el golf.
… que Robinho fiche por el Atlético de Madrid.
… que se cierre el estadio del Barcelona por el cochillinazo del 2002.
… que un atleta español gane el oro de los cien metros lisos olímpicos.
… que Lopera y Del Nido me caigan simpáticos.
… que el Puñetas acuda a un campo de fútbol pagando.
… los éxitos del balonmano español sean celebrados como se merecen.
Yo comprendo que mucha gente necesita creer en los milagros. Como que la Liga española de fútbol es la mejor competición del mundo o que el Real Madrid o el Barcelona se van a quedar todos los años campeones de algo. La gente es que es muy crédula y fantasiosa porque necesita alegrías pal cuerpo en este valle de lágrimas. Pero para un racionalista tan poco milagrero como el que suscribe, hay cosas que no se pueden lograr por muchas toneladas de velas y quintales de rezos que dediquemos a nuestro santo más venerado o virgen más idolatrada. Hasta mi amigo Zetapé, que es muy creyente y fantasioso, piensa que consigue el milagro de la Alianza de las Civilizaciones antes que el patriota Luis consiga de la selección española de Raúl, Torres y restante pólvora quemada el pase a la siguiente ronda del campeonato de la cosa que tenemos ahora entre manos y pies.
Si es que hay cosas que no pueden ser y además son imposibles.