DOS MINUTOS Y 18 SEGUNDOS
Como hoy no sabía qué vampirizar en esta bitacorilla puñetera (las neuronas andan todavía algo remolonas tras el prolongado letargo estival), he tenido la genial idea de gastarme 0,90 € en la compra de un periódico deportivo. Como me los conozco todos (quiero decir que comprar cualquiera de ellos es como tirar el dinero a la papelera, por partidistas, obsesivos con el Madrid y/o el Barcelona, banales y un montón más de sabias virtudes), he optado –como en otras ocasiones- por engordar el bolsillo de don Jesús de Polanco y depredadores colindantes: he pedido a mi quiosquero de cabecera el diario AS. Cuando llegué a casa, tomé una aspirina por aquello de evitar el dolor de cabeza ante tanta majadería como generalmente esconde el periódico, me asenté bien asentado en un sillón de tortura que tengo para estas ocasiones, puse el cronómetro en marcha y comencé el partido. O sea, que intenté leer algo interesante, novedoso, serio y tal y cual. Oiga, en dos minutos y 18 segundos me había ventilado las 48 páginas asianas. No porque el menda tenga una velocidad lectora del copetín, sino porque las fruslerías que allí había no dieron para más. Y que conste que la mayor parte de ese tiempo lo estuve dedicando a dos fotos, una magnífica y otra horrorosa: las que figuran arriba y abajo de estas letrajas, aunque bajadas desde otras páginas interneteras pues los polancos son tan espléndidos (pese a tener forradas de euros hasta las orejas) que tienen un truquillo para impedir que el infeliz visitante de su página web se baje foto alguna por el morro. Ahí están los chicos del tenis con una vestimenta que les sienta peor que una victoria de Federer y la chica despelotada del día, sin la cual seguramente el AS no cubriría ni los gastos de tinta. Así que entre foticos y leña al mono, estoy acabando de parir este comentario de hoy cuando hace unas horas ya me veía con la soga al cuello por falta de imaginación y de entrenamiento. (Algo parecido a lo que les pasa a los galácticos del Real Madrid futbolero en este inicio de temporada). Espero que esta “puñetada” (versión deportiva de la clásica “jaimitada”) no me depare más efectos secundarios que unas saludables risitas de algunos compadres y visitantes, aunque tratándose de don Polanco y sus camaradas, oiga, es que la camisa no me llega al cuerpo. Más o menos como a la chica AS de hoy.
3 comentarios:
Si no te importa, Juan Puñetas, quisiera tener en mi colección de bombones (soy pastelero) alguna foto más grande de la mozuela. ¿Cómo se llama?
Menos mal, amigo, que todavía tenía el periódico en el cubo de la basura, que si no te quedas sin bombón. Dicen en el AS que se llama Vida Guerra, o sea, que se llamará otra cosa en su dni porque llamarse así es para amargar el café a cualquiera. Si buscas en el interné como hice yo pa capturar una afoto, seguro que encontrarás lo que buscas. ¡Buen provecho!
Pues me equivoqué y te hice el comentario en el post de la foto. Será que me fijé más en el documento gráfico que en el escrito ;-)
Sobre el nombre de la chavala, sí es posible que sea su nombre artístico. Pero me gustaría saber donde pone su arte la chica, porque estos del As, a saber de que escenario sacan a las modelos.
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