13 de diciembre de 2005

EL SORTEO DEL CAMPEONATO MUNDIAL FUTBOLERO

El otro día tuvo lugar en Alemania el sorteo del campeonato del mundo que amenaza con devorarnos allá por las primeras calores del próximo veranillo. Un sorteo tele-mangoneado que dio para mucho: disfrutar de la gachí que lo presentaba, escuchar al Juanes ese cantando una de las canciones más horteras que he oído en mi vida (esa de la camisa negra) y ver el careto de tantísima gente que se gana la vida mejor que usted y yo, gracias a que dirigen el mundo éste del balompié mundial y multinacional. Pero vamos a lo que vamos. El Puñetas inflitró en el sorteo a un amiguete que vive por allí (un nieto de un familiar que tuvo que emigrar a la Alemania de los 60 y que se quedó para siempre allí, quiero decir, que tras darle todos sus sudores a la Volkswagen, allí murió y allí lo enterraron). Este punto algo dramático es para compensar lo cómico de lo que a continuación narraré con la peor de mis intenciones y la mejor de mis ironías.

Mandé a herr Roberto a que se colase oficialmente en el salón del sorteo y que se colocase cerquita de nuestros mandamases deportivos, desde el Villar al Luis, pasando por toda la caterva de personajes secundarios que también se cuelan en estas ocasiones. Su informe (el pobre Roberto parece que haya estudiado en España) es corto gramaticalmente hablando pero largo en cuanto a la fidelidad de lo que allí vio, escuchó y medio imaginó.

""Está a punto de salir el primer rival de la selección española. Nuestra representación está rezando con las manos cogidas a la nariz para que nos toquen las selecciones más flojas que acuden al mundial. "Yo quiero que salga Andorra" –ora Villar. "Pues yo preferiría que fuese la de Zarzamora del Palustre" –le contesta el seleccionador susurrando labialmente.

La suerte está echada. Nos toca Túnez. "¡Horror!" –se echan todos las manos a la cabeza. "¡Estos africanos corren que se las pelan! Nos van a mandar pa casa a las primeras de cambio…". Cuando llega el turno del bombo con los equipos europeos, la representación futbolística española es un sin vivir. Llegan noticias del Estado español comentando que algunos jugadores hispanos, de esos que no tendrán más remedio que jugar el campeonato del mundo, se han desmayado o han sufrido palpitaciones al enterarse del primer rival de la selección. Más no hay tiempo para meditar más porque la bolita nos trae un auténtico diablo: ¡¡Ucrania!! –"¡Dios mío, la antigua Rusia!" –oigo decir a alguien que no conozco. "¡No se puede tener más mala suerte de la que tenemos!" –se oye a alguien de más atrás. Empiezan a llegar a mis narizotas algunos efluvios malolientes procedentes de la bancada representativa española y es que más de uno está literalmente cagándose con el porvenir que le espera a la aguerrida selección hispana. Más todavía falta lo peor, el tercer rival, ese que vendrá del Oriente o del Suroeste y que –con la colaboración bastarda del árbitro de turno- nos mandará a freír espárragos a casita antes de tiempo.

-"Sin Raúl, el Xabi ni el Oleguer (que se declarará de ERC, el muy muy) en la tierra de las salchichas no nos comeremos ni la puntita. Vamos es que no nos dará tiempo ni de tomarnos una cerveza a gusto" –piensa para sus adentros uno de los vicepresidentes que hay por aquí.

Por fin, sale el último jinete del Apocalipsis: ¡Arabia Saudí! ¡Ben Laden! Ahora sí que la hemos jodido, leo en las caras de todos nuestros directivos y seleccionador. "Si ni los americanos pueden con ellos, ¿qué coño vamos a poder nosotros? Además, que los partidos serán en el verano y estos tíos sauditas aguantan el calor que no veas. Estarán jugando como en casa. ¡Nos van a hacer tragar todo el polvo de su desierto!"

Veo la cara de desolación de nuestros dirigentes futboleros. Ellos, que venían con más optimismo que el Alcoyano a ver si teníamos suertecilla en el sorteo, tras haber conseguido que la FIFA nos colocara como cabezas de serie, gracias a un camión de jamones de Jabugo y de Guijuelo. La charcutería es que hace milagros. Pero contra la mala suerte no se puede luchar. Si nos hubiera tocado Andorra, Bangladesh y Mónaco…

Al final, hay que asumir las consecuencias. Presiento que algunos jugadores hispanos están vomitando en sus respectivas casas, temiéndose lo peor cuando tengan que verse las caras con los tunecinos, los ucranianos y los saudíes. Aquí, en Alemania, los directivos y seleccionador, no tienen más remedio que disimular y poner buena cara. –"A lo mejor estamos inspirados durante los tres primeros partidos"… -"Es bueno que empecemos a jugar los últimos". –"Como será verano, lo mismo los ucranianos se derriten, los tunecinos están con el ramadán y los saudíes han sido detenidos en el aeropuerto de Munich por contrabando de armas"…

Sólo Luis, el seleccionador, el sabio de Hortaleza (¿o era Hortaliza?) con esa veteranía y sapiencia que la pelotita le ha dado en su ya larga vida, exclama a quien quiera oir:

-Lo peor de todo serán los cruces.

Este va de optimista. O sea, que piensa clasificarse para los octavos. Y si lo hace, ¿qué espera? ¿Encontrarse con Togo, Ghana o Cuba en los cuartos de final?""

Hasta aquí la transcripción no literal del escrito enviado por mi amiguete alemán-español. Mi gran duda es si me ha tomado el pelo o si lo que cuenta es cierto. Por si acaso, y para que nadie se moleste, diré como en las películas de cierto fuste: -"Aviso: todo parecido con la realidad es pura coincidencia". A mí que me registren.

2 comentarios:

la aguja 13/12/05, 22:19  

Es la tercera vez que escribo mi vaticinio particular. En la primera fase perderemos uno, empataremos otro y ganaremos el otro de más allá. Nos clasificaremos llorando, para después caer eliminados en uno de esos partidos de "jugamos como nunca y perdimos como siempre".

¿Pero qué esperan estos "futbolistos" del millón (del millón de euros, se entiende)? Estos pretenden llegar a la final y jugarla contra uno de esos equipos membrillo.

Creo que una selección alemana (o italiana) de jugadores ya retirados nos pondría las cosas muy muy difíciles. Lo de España es el fútbol-playa, el fútbol-sala (éste sí) y el futbolín. Y si el mundial fuera del FIFA de la PlayStation, seguro que alguno de los nuestros llegaba a la semifinal con garantías.

Anónimo 15/12/05, 17:13  

jajaja, muy bueno lo del periodismo de investigación...no pasamos de primera ronda ni de coña

  © Blogger template 'Greenery' by Ourblogtemplates.com 2008

¡Gracias por vuestra plantilla! (El Puñetas, agradecido).