UNAS CUANTAS PILDORITAS
Empezamos la semana no sabiendo de qué escribir y la acabamos sacándonos unas cuantas píldoras de la nariz deportiva. ¿Está el Puñetas en tan baja forma como el risueño Ronaldinho? ¿Estarán ambos enamorados de una jai jamona que les sorbe el cerebro y otras cosas? Pues el astro brasileño no sé (lo suyo será simplemente un esporádico eclipse solar), pero el Puñetas sigue tan pitufo como siempre, lo que pasa es que a veces hay que tomarse ciertos respiros para poder seguir dándole a la manivela. Así que pista va, que hoy hablamos de unas cuantas cosas en plan pildorilla, breve y concisamente.
* Horror, otro nuevo Madrid-Barça. Me exilio a Portugal el sábado y domingo. Que ustedes lo horroricen bien.
* Parece que no sólo se confirma que el camarada Lissavetzky (llamémosle Pérez de ahora en adelante) viajó al mundial de Baloncesto a Japón con la señora del bracito (pagaba gratis-total la Federación) sino que también lo ha hecho sin costarle un duro toda una patulea de politiquillos provincianos por aquello de que donde caben dos caben veinte, bien arrejuntaditos. Hay que fomentar la afición al baloncesto: tú, querido lector, puedes ser el siguiente invitado si sabes arrimarte bien a la canasta del señor Pérez y del señor Sáez, el desprendido y generoso presidente de la FEB.
* ¿Ganará Alonso su segundo campeonato mundial de ese deporte tan popular que todos los conductores quieren imitarlo en las carreteras españolas y luego pasa lo de los tres mil muertos anuales? Lo contaremos el próximo día si logramos sobrevivir a las toneladas de pegajosa baba peloteril que los chicos de Telepingo echarán por su boquita en la retransmisión del evento.
* Los aficionados griegos siguen haciendo de las suyas, no sólo dentro de los campos sino fuera. El otro día, como premio a su victoria en campo heleno, al autobús de la Roma le tiraron piedras (bueno, esto es lo normal en todas partes) y luego un cóctel molotov que afortunadamente no llegó a explotar. Si se pusieran de acuerdo todos los equipos europeos para no viajar a Grecia ni a Turquía (otros que tal) se acababa tanta manga ancha. Claro que a lo peor tal medida era el inicio de la tercera guerra mundial.
* Leo en Bar Deportes que en los juegos de la Lusofonía (un invento de nuestros amigos portugueses y brasileños), la selección de Timor Oriental encajó 56 y 76 goles respectivamente frente a Portugal y Brasil en sendos partidos de fútbol sala. Y sigo leyendo -atónito, pasmado e incrédulo- que las crónicas de los partidos han recalcado el alto grado de profesionalismo y deportividad de los jugadores portugueses y brasileños pues en ningún momento menospreciaron al rival. El compa de la Aguja habla de “sordidez deportiva” en vez de “juegos de la confraternización”. Aquí el Puñetas afirma, sin que se le caigan los anillos, que lo de marcar a un equipo contrario 76 goles es de juzgado de guardia, un abuso de menores, una vergüenza. Si hay algo que un deportista debería tener claro es que jamás hay que humillar al vencido y esos 76 goles son como 76 puñales clavados en el equipo contrario. Pues ya está dicho…
* Tarde, muy tarde, pero al final lo he visto. Ese gol de Agüero conseguido con la manita enguantada en el partido del At. de Madrid contra el modesto Recreativo de Huelva. Oiga y el tipo, un niñato como quien dice, celebrándolo por todo lo alto: “Estoy muy contento por mi gol, que es el primero en el Calderón. Fue una jugada muy rápida; todos queríamos conseguir el tanto. Entré con todo y al rematar, la pelota me tocó en la mano. Fue un acto reflejo". Igualito, igualito que un tal Daniele Rossi, que en un partido de la Liga italiana de la temporada pasada, el Roma-Messina, marcó también un gol con la mano. Los jugadores rivales ni siquiera tuvieron tiempo de protestar al árbitro, porque el jugador romano, nada más ver que la pelota se metió en el arco, fue directamente hacia aquel para decirle que el tanto había sido ilícito. "Hice lo que debía por mí mismo, mis compañeros y mis rivales", manifestó Rossi. No sé si Agüero llegará a ser una figura del balón, pero lo que sí sé es que el niñato no tiene ni puñetera idea de lo que es el fair play y la deportividad. Arrieritos somos…
* Y colorín, colorado estas pildoritas se han acabado…
* Horror, otro nuevo Madrid-Barça. Me exilio a Portugal el sábado y domingo. Que ustedes lo horroricen bien.
* Parece que no sólo se confirma que el camarada Lissavetzky (llamémosle Pérez de ahora en adelante) viajó al mundial de Baloncesto a Japón con la señora del bracito (pagaba gratis-total la Federación) sino que también lo ha hecho sin costarle un duro toda una patulea de politiquillos provincianos por aquello de que donde caben dos caben veinte, bien arrejuntaditos. Hay que fomentar la afición al baloncesto: tú, querido lector, puedes ser el siguiente invitado si sabes arrimarte bien a la canasta del señor Pérez y del señor Sáez, el desprendido y generoso presidente de la FEB.
* ¿Ganará Alonso su segundo campeonato mundial de ese deporte tan popular que todos los conductores quieren imitarlo en las carreteras españolas y luego pasa lo de los tres mil muertos anuales? Lo contaremos el próximo día si logramos sobrevivir a las toneladas de pegajosa baba peloteril que los chicos de Telepingo echarán por su boquita en la retransmisión del evento.
* Los aficionados griegos siguen haciendo de las suyas, no sólo dentro de los campos sino fuera. El otro día, como premio a su victoria en campo heleno, al autobús de la Roma le tiraron piedras (bueno, esto es lo normal en todas partes) y luego un cóctel molotov que afortunadamente no llegó a explotar. Si se pusieran de acuerdo todos los equipos europeos para no viajar a Grecia ni a Turquía (otros que tal) se acababa tanta manga ancha. Claro que a lo peor tal medida era el inicio de la tercera guerra mundial.
* Leo en Bar Deportes que en los juegos de la Lusofonía (un invento de nuestros amigos portugueses y brasileños), la selección de Timor Oriental encajó 56 y 76 goles respectivamente frente a Portugal y Brasil en sendos partidos de fútbol sala. Y sigo leyendo -atónito, pasmado e incrédulo- que las crónicas de los partidos han recalcado el alto grado de profesionalismo y deportividad de los jugadores portugueses y brasileños pues en ningún momento menospreciaron al rival. El compa de la Aguja habla de “sordidez deportiva” en vez de “juegos de la confraternización”. Aquí el Puñetas afirma, sin que se le caigan los anillos, que lo de marcar a un equipo contrario 76 goles es de juzgado de guardia, un abuso de menores, una vergüenza. Si hay algo que un deportista debería tener claro es que jamás hay que humillar al vencido y esos 76 goles son como 76 puñales clavados en el equipo contrario. Pues ya está dicho…
* Tarde, muy tarde, pero al final lo he visto. Ese gol de Agüero conseguido con la manita enguantada en el partido del At. de Madrid contra el modesto Recreativo de Huelva. Oiga y el tipo, un niñato como quien dice, celebrándolo por todo lo alto: “Estoy muy contento por mi gol, que es el primero en el Calderón. Fue una jugada muy rápida; todos queríamos conseguir el tanto. Entré con todo y al rematar, la pelota me tocó en la mano. Fue un acto reflejo". Igualito, igualito que un tal Daniele Rossi, que en un partido de la Liga italiana de la temporada pasada, el Roma-Messina, marcó también un gol con la mano. Los jugadores rivales ni siquiera tuvieron tiempo de protestar al árbitro, porque el jugador romano, nada más ver que la pelota se metió en el arco, fue directamente hacia aquel para decirle que el tanto había sido ilícito. "Hice lo que debía por mí mismo, mis compañeros y mis rivales", manifestó Rossi. No sé si Agüero llegará a ser una figura del balón, pero lo que sí sé es que el niñato no tiene ni puñetera idea de lo que es el fair play y la deportividad. Arrieritos somos…
* Y colorín, colorado estas pildoritas se han acabado…
6 comentarios:
Pues yo te daré unas contracepciones pildóricas, jeje:
* ni en Portugal te librarás; tal vez en Tuvalu…
* pues yo me alegro de que haya sido la federación quien ha pagado los viajes y estancias; lo lamentable es que lo hubiéramos pagado todos con dinero público; otro asunto es si habrá compensación económica vía CSD…; pero esa es otra historia diferente a ésta
* que lo de Alonso es un circo de deporte profesional está clarísimo; ya me gustaría a mí que el asunto estuviera tan claro en el futbolín nacional
* ¿Turquía es Europa? Bueno, si lo es Israel a efectos deportivos…; al final volveremos a los tiempos de Felipe II, que decía que en Europa no se ponía el sol (bueno, decía que en sus dominios, pero en aquella época era prácticamente lo mismo)
* en cuanto a lo de la sordidez, me remito a la definición del Diccionario de la RAE; coincido contigo en que ésta no es la mejor manera de confraternizar; pero veamos qué ocurrió en los Juegos Mediterráneos
* ¿este Agüero es argentino?; lo digo por aquello de la imitación; como Maradroga lo metió con la mano y se convirtió en d10s, pues todos los niños argentinos quieren imitarlo. Has estado muy afortunado rescatando la imagen del italiano, porque de esas cosas la gente no se acuerda; y sin embargo se transmite la imagen de que el fútbol transalpino es todo trampas y marrullerías; si será así que hay gente que ha llegado a justificar el cabezado del carnero Zidane alegando que lo que le dijo Materazzi “tuvo que ser muy grave”; es decir, ni siquieran sabían qué le dijo o le dejó de decir
Me dicen que la frase de los Austria la pronunció el padre de Felipe II, Carlos I. Buscando por la Internet parece que ni las Academias lo tienen claro. La verdad es que los tíos lo tenían todo. ¡Vaya selección de fútbol se hubiera podido montar!, ¿eh, Juan?
Toda Alemania, gran parte de Italia y de Francia; y creo recordar que Argentina, y Portugal y Brasil también…
De aquella, ¿habríamos sido campeones de la FIFA?
¡¡NO!!, la FIFA sería nuestra, jajaja.
Por cierto, ¿qué habrá sido de los descendientes de los Austria? Seguro que están mandando en alguna Consejería o Concejalía. ¿O será el señor Ángel María Villar descendiente de tan regias criadillas y está en la labor de conquistar la FIFA? Dejémosle tranquilo, pues.
¡Qué descuido!, me he dejado a Holanda, que vaya si hubo palos en los Países Bajos por motivos de unos temas religiosos de nada (la religión, como siempre, en lugar de para unir sirvió para matarse; como el fútbol, ¡vaya!).
De aquella época otra famosa frase: “poner un pica en Flandes”.
Por eso, el campeonato del mundo mundial para los muchachitos españoles del patadón al pelotón supone para ellos poner una pica en Flandes.
De vuelta del exilio metafórico portugués, veo que te ha dado un ataque de memoria histórica, je, je. Pero hombre de dios, remontarte a Felipe II cuando podías haberlo hecho a Suárez, González, Aznar o simplemente Zapatero. A cada uno de estos gobiernos he oído eso de que han sido los mejores gobiernos de la historia. Así que, a su lado Felipe II, Carlos I y los Reyes Católicos eran una piltrafilla. Incluso, visto lo que opinan algunos señoritos de corral, parece que ni existieron. En fin, que yo creo que ni la selección española de furbo de Felipe II, con medio mundo a sus pies, hubiera ganado el mundial. Lo que sí veo es que te parece bien la esplendidez de la Federación Española de Baloncesto invitando a ciertos políticos y señoras. Hay muchas empresas españolas que venden el careto de que son privadas pero en realidad viven a costa del erario público (subvenciones, fondos de reptil, sueldecillos compensatorios...). Y tengo para mí que la Federación de Baloncesto es de esta calaña. Otra cosa sería la ACB. Pero bueno, como decía en el anterior articulillo, tampoco es para ponerse como se han puesto las avispas de la emisora de los obispos. Aquí viaja gratis total, o casi, hasta el tonto del pueblo. Con el INSERSO, creo...
Bueno, dejándome de historias varias y hablando en serio, lo de la federación de baloncesto no me parece bien ni mal. Simplemente creo que no debo entrar a valorar lo que una entidad privada hace con su dinero.
Hubiera estado mejor que hubieran invitado a los irresponsables del Arco y de la Aguja a ver Japón y sus geishas para que hubiéramos posteado algo del mundial ;-)
Pero, y perdón por insistir, una federación española es una entidad privada. Dispone de sus fondos (que son privados) y debe rendir cuentas a sus asociados. Y, faltaría más, pueden seleccionar a quien les venga en gana (lo que en el mercadillo del fútbol la peña no parece tener asumido).
Otra cosa, y lo dejé caer así como de puntillas, es que me temo que habrá compensación económica por ese dispendio vía CSD. Pero eso ni tú ni yo ni los obispos lo vamos a poder demostrar.
Supongo que lo que pasó simplemente es que se encontraron en el CSD con que no había consignación presupuestaria para el viaje (se habrían comido en Alemania todo el fondo de imprevistos) y tiraron del fondo de la federación que ya repondrán. Pero, como digo, es sólo una suposición que líbreme dios de elevar a la categoría de rumor.
La diferencia estriba en que no ha habido una aportación económica (subvención) a priori para esos viajes. La federación lo ha pagado de su bolsillo. En otros deportes lo hacen al revés; y claro, así se montan los bollos que se montan.
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